La cuesta de enero
Y tan cuesta, entre unas cosas y otras, hoy ha sido el primer día que he salido a la hora del trabajo en lo que llevamos de año. Ha costado, pero al fin he podido llegar a casa a las 19:00 y hacer varias cosas. Aunque al final me he pasado la tarde sin empezar nada importante porque estaba esperando al padre de mi novia para hacer un reciclaje masivo de electrodómesticos, regalo de los antiguos inquilinos del piso.
En nuestra casa todo sigue igual que el año pasado, aún falta por acabar la instalación eléctrica de la habitación de los ordenadores y terminar de pintar el pasillo (la junta de la pared con el techo)
Por lo demás, sigo necesitando más enchufes para poder conectar todos los cachibaches que arrastro conmigo. Al menos encontré la PSP que había permanecido oculta en una caja de la mudanza. Ya está actualizada a la penúltima versión del firmware, como van tan rápido ya han sacado una nueva.
En el plano laboral no me puedo quejar, ahora me toca maquetar las webs hasta que encuentren un sustituto/a para Diana. Además durante enero hemos tenido la migración de servidor, así que mientras programaba también tenía que ir portando las aplicaciones ya desarrolladas de un lado a otro. El resultado han sido largas tardes de trabajo.
Al menos he podido empezar febrero estando en casa y estudiando un poco de japonés, que falta me hace de cara al futuro curso de nivel 6.
En nuestra casa todo sigue igual que el año pasado, aún falta por acabar la instalación eléctrica de la habitación de los ordenadores y terminar de pintar el pasillo (la junta de la pared con el techo)
Por lo demás, sigo necesitando más enchufes para poder conectar todos los cachibaches que arrastro conmigo. Al menos encontré la PSP que había permanecido oculta en una caja de la mudanza. Ya está actualizada a la penúltima versión del firmware, como van tan rápido ya han sacado una nueva.
En el plano laboral no me puedo quejar, ahora me toca maquetar las webs hasta que encuentren un sustituto/a para Diana. Además durante enero hemos tenido la migración de servidor, así que mientras programaba también tenía que ir portando las aplicaciones ya desarrolladas de un lado a otro. El resultado han sido largas tardes de trabajo.
Al menos he podido empezar febrero estando en casa y estudiando un poco de japonés, que falta me hace de cara al futuro curso de nivel 6.
